Hoy nuestra clase estaba a oscuras, las risas y un poquito de susto se mezclaban en nosotros....
La sorpresa y el asombro estaban presentes por lo tanto asegurábamos con ello la atención, fundamental para el aprendizaje, para la pregunta, para la duda, para la reflexión... Y es que como señala Coral Elizondo: "El aprendizaje es atención más memoria" y la atención sin motivación no abre sus puertas.
¿Qué ocurre cuándo no vemos?...
Ya sentados en asamblea y con más luz la pregunta no es una hipótesis, no es algo lejano que tienen que imaginar, si no una pregunta de algo que han vivido durante un tiempo... Sorprendidos comienzan a decir todo lo que ocurre si no vemos... y ante ellos apuntamos en mayúsculas y despacio (no olvidamos que somos sus modelos escribiendo).
Todas sus ideas son registradas porque todas son importantes, pues no se trata de apuntar solo las que esperamos.
Sus mentes están abiertas para percibir la falta, para conocer el sentido de la vista y sobre todo para valorarlo, para empatizar con aquellas personas que no lo tienen. A veces solo conocemos y valoramos cuando no tenemos y la vista es uno de ellos.
Comenzamos pues a conocer... a preguntarnos, a pensar y a buscar en nuestras ideas lo que sabemos, ampliándolas de forma significativa con las nuevas que vamos encontrando, consiguiendo así un aprendizaje significativo y funcional.
Uno de nuestros alumnos ha dicho que las letras no las ven y ¿entonces?... como lee la niña que aparece en uno de los videos...? "Está blanco seño, no hay letras". Es entonces cuando presentamos las letra en braille, teniendo la oportunidad de tocarlas y ver como los puntitos cambian de lugar y cada letra es diferente, por lo tanto ellos necesitan tocar para leer...
Otro niño comenta que te chocas...¿Qué harán para no chocarse?
No lo sabemos, buscamos y nos sorprende como se desplazan, desubriendo los bastones y los perros guía, lo cual nos deja con la boca abierta.
Ya podemos decir que comienza la posibilidad de valorar la vista, lo maravilloso que es percibir los colores, el cielo, los juguetes, la cara de los amigos... y es cuando nos observamos los ojos y hablamos de qué hay en ellos, cómo son... Aparecen los párpados que.... "No se cierran seño" y vemos como no podemos estar sin bajarlos y en la PDI nos dicen que nos protegen, al igual que lo hacen las pestañas...
Toda una lluvia bonita de ideas que nos hace mirarnos los ojos porque hablan de la pupila, pero y el iris... "No lo veo seño"...
Juntos buscamos espejitos y salimos al patio a observar nuestros ojos que dentro no se ven. La pupila y el iris de muchos de ellos se unen en un mismo color, pero en otros no...
Sorprendidos de sus propios ojos estamos motivándoles para aprender, para saber y para observar de forma más directa algo que tal vez nunca se pararon a pensar y observar.
Y ahora dentro de todo este proceso... toca JUGAR, porque jugando estamos alegres y es el camino para saber...
Que mejor juego que LA GALLINITA CIEGA, desconocido para gran parte de ellos.
Buscamos quiénes serán nuestros amigos, recordamos, pensamos, imaginamos, comparamos y .... ¡Es Martina!! a lo que los amigos responden con un noooooo que Martina tiene trenzas...
Y ahora solo queda contárselo a los papás para que desde casa sigan este bonito trabajo y aprendizaje que comenzamos a realizar...
Y las notas llegan a casa con letras, algunas con más, otras con menos, algunas silábicas, otras silábicas alfabéticas, otras sin correspondencia fonética pero lo importante es que todos la realizan sin miedo y por supuesto todos perciben que las letras comunican, y buscan en su cabeza y expresan a través del lenguaje escrito lo que saben y aplican...
Y ahora a seguir, pero ya con el apoyo de casa... y sobre todo la alegría, el respeto y el interés por aprender sobre ello....
"El cerebro solo aprende si hay emoción". Francisco Mora