"Uno recuerda con aprecio a sus maestros brillantes, pero con gratitud aquellos que tocaron nuestros sentimientos."
Carl Gustav Jung.
La escuela del futuro y del presente necesitan maestros que toquen de verdad el corazón, que sientan, que vibren y que sonrían como lo hace esta gran maestra y persona: Maria Luz Lopes.
En tan solo unos días puedes llegar a conocer y sentir a una persona mucho más que en años se conoce a otras. Esta MAESTRA portuguesa me ha dejado huella y es por ello que quiero presentarla en este ¨pequeño rincón", mi blog. Y me servirá para expresar la escuela en la que creo, la que deseo y la que funciona... Educamos con lo que somos, con lo que tenemos y no solo con lo que sabemos y María Luz traspasa los corazones en horas, con una fuerza, seguridad y alegría que engancha alumnos y a docentes.
Me encantaría poder estar cerca de ella y no lo estoy, pero he aprendido muchísimo en pocos días, como la IMPORTANCIA DE SER para educar, la importancia de la alegría, del amor, de la vocación. Maestros como ella aportan mucha energía, fuerza e ilusión para seguir luchando por una escuela de todos, inclusiva, donde todos tengan su lugar y sean felices. Me reafirmo en la importancia de SENTIR, de CREER en los alumnos, la ALEGRÍA de enseñar, el DESEO de vivir y COMPARTIR, haciendo "tortillas" y no "hueveras".
Nuestra escuela y nuestra sociedad necesita gente con tanta luz como ella. Gente luchadora, con carisma, con brillo en los ojos, con una mirada transparente que te hace quererla y sentirla a las horas de estar a su lado... Eso que yo he sentido lo sienten los alumnos y se ve en los ojos de estos chicos y chicas cuando la miran por el pasillo, cuando la saludan en un restaurante y la recuerdan.
En mi periodo de observación he tenido la gran suerte de observar rodeada de GRANDES MAESTRAS que aman la escuela y aman a los alumnos, he tenido la suerte de vibrar y sentir aprendiendo de inclusión educativa, integración, trabajo, asertividad, empatía, igualdad, humildad... porque por encima de los recursos y los métodos está la educación emocional y ésta no se consigue enseñar y transmitir si no se tiene en uno mismo.
Gracias Maria Luz por tanto que me has dado en tan poco tiempo y sobre todo por tu labor en la escuela y en la sociedad.... Sigue brillando de forma tan bonita... yo intentaré ser un poquito como tú porque de los grandes maestros siempre aprendí y tu eres una de esas personas que se cruzan en mi vida y marcan mi vida profesional y personal.
Porque aprender de ellos es fantástico y yo "aprendí de tí, "sigue nadando"... Nada es casualidad y tu nombre LUZ tampoco lo fue.